Herrero en Bogotá (51)

¿Necesitas instalar una escalera en tu casa, pero tienes poco espacio? Las escaleras de caracol son una de las mejores opciones para ahorrar espacio y facilitar el acceso a un piso superior. Una de las opciones más decorativas, tanto para exterior como para interior son las escaleras de hierro forjado. ¡Aportarán un toque clásico y único al entorno!

Para hacer una escalera de caracol de herrería en tu casa, debes tener en cuenta estos pasos:

• Elige la forma que más se ajuste al espacio: por lo general, si el espacio del que dispones es menor a 1,5m y cuadrado, lo mejor es elegir una escalera de caracol circular. Si el espacio es rectangular, alargado o la altura es baja, opta por una escalera de caracol semicircular o en forma de L.
• Toma las medidas correctas: es necesario que las escaleras sean cómodas. Aunque queramos ahorrar espacio, tenemos que otorgarles las dimensiones suficientes a los peldaños para que no sea complicado subir y bajar las escaleras. En el caso de las escaleras de caracol, deberemos calcular el diámetro de la escalera, el tamaño de la huella y el de la contrahuella (la altura del escalón) para poder insertar el número de peldaños suficientes. Para guiarte, en una escalera con un diámetro de 1,10m, una contrahuella de 20 centímetros ya será bastante alta.
• Dtermina dónde situar el eje central: este suele ser un tubo de hierro redondo y, alrededor de él, se situarán los peldaños. Estos tendrás que colocarlos a la altura adecuada para que subir la escalera sea cómodo.
• Una vez colocado el eje central y tomadas las medidas, tendrás que armar por otro lado los escalones. Para ello, calcula la forma y las medidas necesarias de cada uno. Comprueba que el soldador se encuentre caliente y comienza a unir las piezas que formarán cada uno de los escalones. No olvides mantener las precauciones de seguridad necesarias a la hora de soldar, asegúrate de llevar la ropa adecuada, guantes, gafas y protección para la cabeza, entre otros.
• Cuando estén soldados, fríos y limpios, une los escalones alrededor del eje central. Suéldalos poco a poco, asegurándote de que queden bien ensamblados y sean estables.
• Por último, no olvides soldar la barandilla que irá alrededor y ayudará a que podamos subir la escalera. Hazlo cuando te asegures de que todos los escalones están bien soldados y fijos.

Como ves, crear desde cero tu propia escalera de caracol puede ser complicado, sobre todo si no tienes todos los conocimientos y materiales necesarios para crearla desde cero. En este caso, lo más recomendable es contactar con un herrero en Bogotá para que realice una visita a casa y tome las medidas necesarias del espacio. Después de crear el diseño y las piezas, que podrán decorar con los detalles que prefieras, el siguiente paso será ensamblar la escalera directamente en tu casa. ¡Y listo! Ahorrarás tiempo, esfuerzo y conseguirás el acabado profesional que buscas para tu casa.

¿Buscas proteger tu casa y tu jardín del exterior? Los portones son perfectos para delimitar y añadir seguridad a la entrada a nuestra vivienda. Existen portones de diferentes formas y materiales; sin embargo, uno de los más seguros y resistentes al paso del tiempo son los portones metálicos. ¿Quieres saber cómo hacer tu propio portón metálico? ¡Sigue leyendo!

• En primer lugar, mide el espacio en el que colocarás tu portón metálico. Si quieres facilitar la entrada de un auto, deberás tener en cuenta las medidas para que pueda entrar sin problemas.
• ¿Qué diseño deseas para tu porton? Puedes optar por uno sencillo y totalmente opaco, o uno con barras separadas que dejará entrever el interior de la parcela. Si prefieres algo más estético, ya que será la primera impresión de tus visitas, puedes añadirle un diseño a tu gusto, todo liso, con formas geométricas, dibujos grabados… ¡tú eliges!
• Consigue los materiales con las medidas y el grosor que deseas (tubos de hierro, pletinas para rellenar el porton…). Es posible que tengas que medirlos y realizar cortes, para lo que necesitarás una tronzadora o sierra para cortar hierro. Al utilizarla, protégete con guantes, ropa especial y gafas, ya que desprenderá chispas, y ten especial cuidado con su manejo para evitar accidentes. Corta los tubos o láminas de hierro por las marcas que hiciste con las medidas de tu portón.
• Cuando tengas todos los hierros cortados, ¡llega la hora de soldar! Primero coloca la estructura del esqueleto o marco que formará tu puerta, para asegurarte de que las medidas son correctas y todas las piezas coinciden bien. Cuando compruebes que cuadran bien, comienza a soldar para unir las piezas. Asegúrate de utilizar las gafas, mascarilla y las prendas de protección adecuadas durante todo este proceso.
• Una vez frío, pule las imperfecciones de la soldadura para que quede liso y poder apoyar las pletinas. Puedes hacerlo con una radial o esmeril angular.
• ¡Ya tienes lista la estructura! Ahora completa el interior del portón con las láminas o el material que elegiste. Pueden ser láminas de pletina más finas, solo tendrás que colocarlas con el espacio de separación que desees y hacer pinchazos con el soldador, no un cordón continuo. ¿Un truco? Compra un ángulo doblado como terminación final para disimular estas marcas de unión entre las pletinas y la estructura del portón.
• Pinta con antióxido las zonas que cubrirás con el ángulo de terminación. Colócalo sobre el marco y pincha las pletinas por el otro lado. Igualmente, suelda los ángulos en los cantos del marco y pule las soldaduras.
• ¡Ya casi está listo! Ahora tendrás que colocar tu portón en su lugar. Es posible que necesites incluir un pilar, si no lo tienes ya, para sostener la puerta, y unas bisagras para soldar en tu portón y poder abrirlo.
• Para darle el toque final, pinta tu portón metálico. Puedes comprar pintura o spray especializado que sea anticorrosivo, hidrorrepelente, antirayos UV… ¡Conseguirás un acabado perfecto!

Ahora ya sabes cómo crear tu propio portón metálico, ya sea porque tus necesidades cambiaron, porque ya es hora de cambiar o para aportar seguridad a tu casa. No obstante, si no dispones del tiempo o de los materiales suficientes, lo mejor es contactar con un herrero experto en Bogotá, especializado en la creación e instalación de portones metálicos. Además de crear el mejor portón para tu casa, se encargará de la instalación y te asegurará el mejor acabado.

En casa muchas veces tenemos que unir piezas de plástico o de metal, pero no contamos con los materiales profesionales que serían necesarios. Afortunadamente, podemos recurrir a la soldadura en frío para salir del paso y sin necesidad de aplicar ningún tipo de calor. Sigue estos pasos para aplicarla de manera correcta:

1. Elige el producto adecuado: existen diferentes productos para aplicar la soldadura en frío. Marcas como Pattex, Ceys, Loctite o Wurth ofrecen una buena solución para realizar tareas de bricolaje. Además, puedes encontrarlo en diferentes formatos, desde líquido, masilla o en spray.
2. Limpia la superficie que quieres unir, déjala libre de grasas y aceites. En caso de que la superficie tenga óxido, tendrás que eliminarlo, ya que sino el producto no se adherirá bien y las piezas no se soldarán. También puedes aplicar una capa anticorrosiva para asegurar una mejor fijación del producto.
3. Aplica el producto según las instrucciones del fabricante. En el caso de pegamentos o masillas, muchas veces solo tendrás que aplicarlo sobre la superficie que desees pegar. No obstante, otros productos algo más especializados cuentan con diferentes componentes que deberás mezclar hasta conseguir una solución homogénea; después, solo tendrás que aplicar la mezcla en las zonas del material que queremos unir.
4. Deja solidificar el producto. Por lo general, para los productos más sencillos tan solo tendrás que esperar unos minutos. Para otros es posible que necesites media hora o 40 minutos para que el producto se solidifique y unas horas antes de poder volver a manipularlo. Sea como sea, sigue las instrucciones que vienen con el producto.
5. Una vez solidificado y esperado el tiempo prudencial, podrás lijar las imperfecciones, taladrar o pintar la pieza unida.

Este tipo de soldaduras en frío son muy útiles para realizar reparaciones rápidas y duraderas en casa. Puedes usarlo para unir tuberías, juntas, calzados e, incluso, baldosas. No olvides revisar bien las especificaciones del fabricante para asegurar una correcta aplicación y, si la soldadura en frío no te funcionó o necesitas ayuda, lo mejor es contactar con un herrero de timbrit experto en la manipulación de estos materiales. ¡Obtendrás el mejor resultado!