El agua caliente en casa se ha convertido en un atributo “necesario” en muchos hogares. Sobre todo en aquellas localidades que tienen temperaturas bajas y más aún en las mañanas, al momento de tomar el baño.
Sabemos que un calentador con problemas puede volverte loco, pero ten calma. A continuación, te contaremos cuáles son los problemas más comunes que suelen aparecer con los calentadores para ayudarte a identificar a qué te estás enfrentando. ¡Así lograrás entenderlo mejor y podrás ponerte a la acción! Lo más probable es que una pequeña reparación sea suficiente, pero también puede suceder que debas cambiar tu querido calentador por uno nuevo. ¿Quieres saber cuáles son sus problemas más comunes? ¡Sigue leyendo!
El calentador gotea o tiene una fuga
¿Notas un exceso de agua alrededor del tanque o de las tuberías a las que está conectado? Las fugas y goteos son de los problemas más comunes con los que te puedes encontrar. Esto se debe a que, con el tiempo, las calderas van reteniendo óxido y su material envejece, haciendo que el sistema no funcione de manera óptima. Las fugas o goteos son causados por piezas viejas, juntas envejecidas, por tener la válvula de presión demasiado alta o, incluso, por la corrosión de las tuberías. Si no terminas de identificar el problema, nuestros plomeros podrán ayudarte a determinar la causa de la fuga y repararla.
Chorros repentinos de agua fría
Estás disfrutando de tu baño calentito y, de repente, sale un chorro de agua fría que te hace pegar un salto. Esta situación tan desagradable se debe a un problema en la sonda de temperatura.
¿Y si el contraste entre agua fría y caliente no es tan repentino? Si es más bien constante y recurrente, el fallo seguramente esté en el interruptor de la presión de agua. Este es un problema que debe ser tratado por manos expertas, por lo que deberás ponerte en contacto con un profesional para una solución efectiva y rápida.
El agua no calienta
Este problema en particular no suele tener raíz en fallas o desperfectos técnicos, sino más bien en un error en la elección del calentador. Si tu demanda de agua es mayor al tamaño que maneja tu calentador, te encontrarás con este problema. Por eso, a la hora de comprar uno siempre es importante verificar con certeza la capacidad del mismo, para tener un óptimo funcionamiento, acorde a tus necesidades y requerimientos.
La tubería se ha congelado
Si tu calentador es nuevo, lo más probable es que se trate de un calentador de condensación. Estos se valen de un sistema que posee una tubería de condensado para eliminar los gases residuales generados. Si está haciendo mucho frío fuera, es muy probable que el calentador se congele, generando un bloqueo.
Por suerte, este es un problema muy fácil de resolver, ya que solo deberás descongelar la tubería. Puedes hacerlo aplicando agua caliente (¡pero no hirviendo!) sobre la misma usando un paño tibio. Si decides hacer esto por tu cuenta, asegúrate de usar la protección adecuada y hacerlo con sumo cuidado o acabarás lastimándote.
El calentador huele mal
Esto suele deberse a la presencia de bacterias en el tanque. Por eso, una correcta limpieza es crucial, ya que las bacterias se alimentan del gas de hidrógeno elaborado por la descomposición de los ánodos. Lo mejor que puedes hacer ante este problema es pugar tu calentador. Para hacerlo, sigue estos pasos:
- Mezcla peróxido de hidrógeno con agua.
- Lava cuidadosamente el tanque con la solución elaborada.
- Deja actuar por 3 horas y aclara con agua.
En el caso de que el olor persista aún después de una limpieza, la mejor solución es cambiar el calentador.
El calentador hace un ruido similar al de una tetera hirviendo
¿Conoces el sonido de una tetera hirviendo? Ese silbido agudo y persistente puede ser replicado por tu calentador y es señal de un problema. Ten en cuenta que también puede producir un ruido sordo extraño. ¿Adivinas qué puede ser? Así es, todo esto es un indicador de que existe una acumulación de depósitos en tu calentador, algo que comúnmente se genera con el tiempo, sobre todo en lugares donde el agua es más dura.
Esta acumulación se produce por el uso continuo del agua, por lo que es un problema muy usual. Estos depósitos obstruyen el paso del agua en el intercambiador de calor provocando sobrecalentamiento excesivo y, consecuentemente, ruidos extraños. Cuando el calentador está obstruido trabaja además para calentar el agua, reduciendo la vida útil del equipo. Con todo, esto acaba por traducirse en facturas más caras.
¿Reconociste alguno de estos problemas? Si quieres evitar malos tragos e inconvenientes y tener siempre el agua calientita lista para usar, lo mejor es hacer mantenimiento y revisiones periódicas a tu calentador. Si dejamos estar las pequeñas fallas, lo que tendría una solución simple se puede convertir en un problema grave. Esto origina que luego las reparaciones sean más complejas y costosas o que directamente tengamos que comprar un nuevo calentador. Para evitarlo, te recomendamos contactar con nuestros plomeros especializados en Bogotá. Solo tienes que hacer una solicitud y estarán listos para darte una mano con el mantenimiento, las revisiones y las reparaciones. ¡Y a disfrutar de un buen baño caliente y relajante sin ningún tipo de problema!
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